lunes, 2 de enero de 2012

La verdad que se esconde

La verdad que se esconde detrás de unos ojos tan bonitos, ojalá yo la supiera, ojalá me dijeran lo que sienten... cuando le pregunto directamente si le gusta alguna chica, o cuando le hablo de la homosexualidad, de echo creo que él no lo sabe, o sí pero no sabe que lo sabe, ¿me explico? que rimbombante me he vuelto!!!

Y yo me pregunto una y otra vez, ¿se dará cuenta de lo que pasa a su alrededor? lo cierto es que ésta pregunta la voy a contestar yo: SI.
Siente que no le gustan las mismas cosas que a los chicos de su edad, se siente más sensible que sus compañeros, tiene más complicidad con las chicas que con los chicos, y como no, hay momentos en los que le sale su parte más femenina, esa que dicen que tienen todos los hombres, y entonces es como una de ellas, bailando, haciendo gestos...
Ahora viene lo que siento yo, que de eso se trata el blog, de mis sentimientos, no? Pues sería absurdo decir que me da igual, no, no me da igual, y no me importa decirlo, sabéis porqué? porque se que la gente se burla de él, que ya tiene la etiqueta de "mariquita" y eso no sería importante si a él no le doliera, de echo, no sería importante si él ya supiera que lo es, pero la realidad es que le duele y que él no sabe si lo es, y a mí me desgarra el corazón ver que no puede ser él mismo, que no puede decir abiertamente cuáles son sus aficiones, y lloro mucho en silencio, cuando él no me ve, porque su dolor es más mio que de nadie, porque se me multiplica por cien, y Dios mio, no puedo ayudarlo, o al menos no todo lo que debiera.
 Debiera porque siempre he intentado educar a mis hijos como personas autónomas y auto suficientes, vamos, diciéndoles la realidad, que tienen que aprender a solucionar los problemas que les traiga la vida, sobre todo dentro del colegio, ya que yo no estoy ni quiero interceder en la labor de los profesores, siempre asesorados por nosotros.
Claro, me ha costado reconocer que tenía que buscar una actitud realista y a la vez que no le hiciera daño a él, sin dejarle perder su interior ya que es sólo un niño, y así fue como le expliqué que era diferente porque no hacía las cosas que los demás esperaban de un chaval, y que tenía que hacer un  gran esfuerzo para evitar hacerlo fuera de casa, es muy duro, pero por ahora nos va funcionando.

2 comentarios:

  1. Sería interesante que esto lo leyera mucha gente. Yo ya te he puesto un enlace a mi blog. Un abrazo, Blanca.

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  2. Me gusta escribir lo que siento y si encima lo leyera mucha gente, pues mejor, señal de que es un tema interesante, mejor dicho, una realidad interesante...
    Un saludo Miguel Angel.

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