domingo, 8 de enero de 2012

MIRA QUÉ BONITA ES MAMÁ

-Mira mamá, es la muñeca que había pedido, qué bonita es, ¿te gusta mamá?, ¿has visto que pelo tiene?, que contento estoy, es tan guapa, ¿a que sí mamá?- me decía mi hijo el día de reyes.               
Que día tan especial, tan lleno de magia, todos nos sentimos niños ese día, no os parece? y como no, mi hijo siéndolo todavía pues se sentía muy dichoso. Los primeros regalos que fue abriendo eran los inducidos por nosotros, prácticos y necesarios, y aunque él es un niño muy agradecido, sabíamos que el regalo estrella llegaría en casa de su tía, una muñeca que él había pedido y que ella se había ofrecido a regalarle. Desde que la sacó de la caja blindada donde venía, estuvo 20 minutos para liberarla, no se separó de ella... La miraba, la tocaba, le daba la vuelta, la volvía a mirar embelesado, y ya no existió nada más importante para él. Estaba tan feliz, su tía lo hizo tan feliz, que vuelvo a decir lo mismo de siempre, juega con muñecas, ¿y qué?.
Como veréis he hecho referencia a su tía, porque creo que es muy importante que conste quien se la ha regalado, ya que en la familia todo el mundo no cree que deba seguir jugando con muñecas. Ella es su tia paterna y junto a su madre son un vivo ejemplo de normalidad, de no tener que hablar del tema, así que para nosotros imaginaos... son un gran apoyo, y como no, mi hijo lo siente así, como que no tiene que esconderse de nada, ni de sus aficiones ni de sus sueños.
Por éste motivo quería darles las gracias desde aquí por su enorme comprensión y su amor incondicional, y pedir que mucha gente tomara ejemplo de su tolerancia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

eSaniak